27.9.16

maratón woody allen

 
En sus películas, Woody Allen reúne comedia, jazz y situaciones inesperadas. ¿Cuáles son tus favoritas?

Lo primero que un voyeur reconocerá en la sala de cine es la soltura que muestran los personajes de Woody Allen para simpatizar con el público, incluso si son los antagonistas del reparto. Lo segundo es que muchas de sus interacciones parecen casuales, fluidas y callejeras; el director neoyorkino escribe sus guiones con envidiable naturalidad. En apariencia no ocurre nada, los diálogos se amontonan, el tiempo pasa y, de pronto, los eventos terminan por volverse destino. Hay una maestría jazzística en eso. Por último, la encantadora neurosis: Allen presenta el perfil de un artista que aprendió a liberar sus complejos a través del celuloide. «Yo diría que existo más felizmente en mi vida de fantasía que en el mundo real. Puedo imaginar cualquier cosa que quiera, y es un placer», declara en una entrevista con Dick Cavett. Hasta aquí el psicoanálisis de bolsillo.

Si estuvieras en un maratón de Woody Allen, donde te encontraras a ex parejas sentimentales, que a su vez tropiezan con otras ex parejas adoloridas, quizá verías títulos como Annie Hall (1977), Manhattan (1979), Hannah y sus hermanas (1986), Match Point (2005), Vicky Cristina Barcelona (2008), Medianoche en París (2011), Blue Jasmine (2013) o Un hombre irracional (2015). Digo nombres al azar; la filmografía de Allen es un mapa selecto de ciudades románticas y grandes historias. Los conflictos amorosos y la angustia de la vida en pareja se aderezan con stand-up existencial. «¿Por qué estamos aquí? ¿Qué estamos haciendo aquí? ¿De qué va esto? ¿Por qué es importante que envejezcamos, por qué morimos? ¿Qué significa la vida? Y si no significa nada, ¿de qué sirve? Esas son las grandes cuestiones que nos vuelven locos, no tienen respuesta, y uno tiene que seguir adelante y olvidarse de ellas», comenta el director.

Al final del día, Allan Stewart Königsberg (su segundo apellido es idéntico a la ciudad portuaria donde Kant filosofó) se reviste de pesimismo, y vuelve a plantear las mismas preguntas irresolubles. El octogenario y prolífico cineasta atrae por su acento cómico, pero es también un creador malicioso que nos coloca en situaciones inesperadas. Y, claro, está el jazz, una afición que lo mantiene en forma. Toca el clarinete, como Calamardo, todos los lunes en el café Carlyle, con su New Orleans Jazz Band. ¿Pedimos algo?



¿De dónde venimos? ¿A dónde vamos? 
¿Hay posibilidad de tarifa de grupo?
Woody Allen



Publicado originalmente en  FAHRENHEITº Magazine [06.09.2016]



21.9.16

ya viene el día del cuento


Difunde, participa y lee.


El próximo domingo 25 de septiembre se llevará a cabo la instauración del Día del Cuento en Mérida, Yucatán. La fecha conmemora el natalicio del escritor Agustín Monsreal y hace un reconocimiento a sus 45 años de trayectoria, durante los cuales ha divulgado este género a través de la revista El Cuento, fundada por Edmundo Valadés.

Las actividades del programa, organizadas por un grupo de lectores y escritores de la región, le dedicarán un día al cuento en todas sus modalidades—policiaco, erótico, fantástico, entre otros. El objetivo de esta primera emisión es convocar a lectores y escritores de narrativa breve de otros estados del país a participar el próximo año.


PROGRAMA DE ACTIVIDADES

Buenos días, sube un cuento
De 9 a 10 horas
Se invita al público a participar con la lectura de un cuento breve en camiones de las rutas:
42 Sur (calle 69 x 58 y 60)
Alemán Ruta 1 (calle 65 x 54y 56 calle Ancha del Bazar)
Juan Pablo II (calle 64 x63 y 61)
Gran Plaza (calle 58 x 59 y 57)

Viaje al Cuento
De 11 a 12 horas
Parque de Mejorada
Calle 50 x 59 y 57

Lectura escenificada de los cuentos: Una reputación de Juan José Arreola, El paraíso era un autobús de Juan José Millás, en un camión de la Alianza de Camioneros de Yucatán.

Mediante una convocatoria en la página de Facebook se otorgarán 20 boletos para la Ruta Centro-Cuento. El paradero será en el Parque de Mejorada, y se recorrerán las calles de Mérida hasta el Cementerio General y de ahí a la ex Estación de Ferrocarriles, sede de la Escuela Superior de Artes de Yucatán, donde se dará lectura al cuento El guardagujas de Juan José Arreola a cargo de Indalecio Cardeña y Joaquín Tamayo. Se repartirán libros donados por Sedeculta y Leer por placer, A.C.

Conversatorios
De 18 a 20 horas
Centro Cultural Universitario
Jardín Literario de la Biblioteca Central
Universidad Autónoma de Yucatán
Calle 60 x 57

Serie1: El cuento, panorama editorial.
Participantes: Carolina Luna, Carlos Martín, Editorial Tirahule: Luis Herrera Albertos y Jennifer Calderón. Moderadora Celia Pedrero.

Serie 2: El cuento hoy, qué es y cómo se escribe.
Participantes: Roberto Azcorra, Manuel Calero, José Castillo, Nidia Cuán, Víctor Garduño, Roldán Peniche. Moderador Joaquín Tamayo Aranda.
Se obsequiarán cajitas con minificciones.
Entrada libre

A primera voz
De 21 a 24 horas
Galería de Arte Le Cirque
Calle 55 por 70 Barrio de Santiago

Lectura de cuentos en la voz de sus autores
Participantes: Elsa Arias, Arnaldo Ávila, Adolfo Calderón Sabido, Oswaldo Canul, Andrés Castillo, Jhony Euán, Patricia Gorostieta, Ricardo Guerra, Elías Hernández, Yobaín Vázquez.
Clausura y bailongo
Entrada libre

Patrocinadores:
Secretaría de la Cultura y las Artes de Yucatán; Alianza de Camioneros de Yucatán “Gonzalo López Manzanero”; Macondo Café Librería; Galería de Arte Le Cirque; Universidad Autónoma de Yucatán a través de la Coordinación de Bibliotecas, Biblioteca Central y Radio Universidad; Miranfú, Niños, Talleres y Cuentos; Escuela Superior de Artes de Yucatán, Leer por placer, A.C.; Celia Pedrero, Producciones Culturales.

Organizadores y colaboradores del Día del Cuento:
Celia Pedrero, Zandra Pruneda, Kelly Marian Pasos, Joaquín Filio, Adolfo Calderón Sabido, Oswaldo Canul, Karlos Kinto, Eduardo Torres Rodríguez, Víctor Fernández Huchín, Cessna Chavira Garnica, Luis Uriel Pérez Maldonado y Nelly Rincón.



Cuentistas somos y en el cuento andamos.
Agustín Monsreal


Imágenes e información: Boletín Día del Cuento


12.9.16

belleza convulsa


Entre el narcisismo y el slasher azucarado.

¿Qué diremos de Nicolas Winding Refn? Sin obviar su visión daltónica, su actitud FUCK THE SYSTEM ni sus majestuosas atmósferas frías, el director danés nos entrega este 2016 un filme de horror que bebe de las aguas más oscuras del fashionismo. Y no solo eso: también las vomita. El Demonio Neón posee los elementos suficientes para volverse lo mismo un revulsivo hipnótico que un oasis pesadillesco, una cámara de tortura estilizada que una fábula moral con modelos reptilianas. Ojo—y aquí esta palabra juega un papel importante—: cuando creías haber visto lo suficiente, un demonio con sonrisa cínica nos murmura en la delgada piel de los lóbulos: La belleza no lo es todo. Es lo único. Belleza convulsa, felina, surrealista y feral. Pero tratemos de ceñirnos a la historia.

Jesse, una lolita rubia de dieciséis años (Elle Fanning), se muda a Los Angeles para incursionar en el mundo de la moda. Gracias a su envidiable aspecto físico, pronto accede a los círculos más selectos de la industria. Justo en su primera sesión fotográfica, conocerá a una maquillista insípida (Jena Malone) que eventualmente querrá seducirla, y a Sarah (Abbey Lee) + Gigi (Bella Heathcote), un dueto de modelos trasnochadas de colmillos puntiagudos. El plato huele de maravilla, y la cena toma giros tortuosos. Cuando el espejismo nos revela un ángulo de la trama—con la sucinta interpretación de un Keanu Reeves particularmente sórdido—, una serie de circunstancias con hedor lynchiano abrirá posibilidades más sangrientas.

Winding Refn considera que con esta elegante alegoría «intenta sonar la alarma por la forma en que la revolución digital está creando estándares de belleza peligrosos y absurdos, y creando un universo alterno.» Pero ahora no va más allá de los reflectores y la brillantina. Fórmulas útiles, diálogos opacos, extravagancia decadente: la monotonía entra por la puerta grande. Su estilo neo-noir—que alcanzó las cotas más elevadas en Drive—pretende justamente sentar las bases de una dimensión alterna, con imágenes en alto contraste y gore ultrafino. Más o menos como lo hizo Franck Khalfoun en el remake de Maniac (2012), protagonizado por un Elijah Wood introvertido y sangriento. Sin embargo, ni la necrofilia salva la noche.

El director danés, al mismo tiempo que ha logrado un producto casi perfecto en la forma, al extasiarse en la fuente se quedó corto de ideas. Y se ahogó en su propio reflejo, como Narciso. El Demonio Neón puede llegar a ser tediosa y fascinante por las mismas razones. Puede convertirse en un filme de culto, similar a los de Dario Argento y Lars von Trier. Su mérito: la técnica. Su mayor virtud: la construcción audiovisual—con una envolvente banda sonora de Cliff Martinez. El resto es filigrana para amantes de MTV, slasher azucarado. Una sucesión de eventos superficiales, personajes atrapados en el estereotipo, alta costura y bajas pasiones. Eso sí, con un final que no dejará indiferente a nadie. Calculado al milímetro para que tú, querido lector, no puedas dormir.

 

La belleza no lo es todo. Es lo único.


El Demonio Neón. Nicolas Winding Refn. Amazon Studios, 2016.



6.9.16

morfhosis, diseño y arte emergente

 Donde el espacio y las formas dialogan entre sí.


Después de un año de trabajo, Artillery presenta, en colaboración con Estudio Ploka 8.7, una muestra que fusiona lo más destacado en diseño y arte emergente. Morfhosis se suma a la emoción de los espacios de participación abierta, con la finalidad de dar testimonio de los entornos creativos y de colaboración de la escena emergente en la ciudad.
La exhibición colectiva—que incluye piezas de Keef Winter, Jaime Colín, Eblem Santana, Gabriel Garcilazo, Daniela Bojórquez Vértiz y Minerva Ayón—se llevará a cabo del 23 al 25 al septiembre de 11 a 17 horas en Avenida Álvaro Obregón 154-B, Colonia Roma Norte, en paralelo a Gallery Weekend 2016.


«Morfhosis—explica Félix Feria—surge como una exposición colectiva que pretende ser un reflejo de los contextos físicos y reflexivos derivados de una transmutación visible entre arte y diseño; donde el espacio, las formas, lo natural y lo geométrico dialogan entre sí, lo que da testimonio de una buena comprensión de los entornos creativos que emergen en la ciudad.»

SOBRE LAS ORGANIZADORAS
Dirigida por Ana Garza, Tatyana y Greta Strevel, Artillery Arte Emergente es una galería de arte online que nace con el objetivo de encontrar una nueva forma de conectar a artistas jóvenes con coleccionistas jóvenes, y con ello, ofrecer nuevos espacios al arte emergente y poner al alcance del público piezas únicas que van más allá de la decoración.


PLOKA 8.7 es un despacho de interiorismo creado por Ana Cecilia y Jimena Tron dedicado a la creación y desarrollo de proyectos de diseño de interiores que se enfocan en la decoración, modificación y distribución del espacio, buscando siempre un resultado estético y a su vez funcional en que el cliente refleje su personalidad y estilo.




Una transmutación visible entre arte y diseño.
Félix Feria


Imágenes e información: Artillery
Piezas de Minerva Ayón + Gabriel Garcilazo + Keef Winter